Tras no tener muchas oportunidades en
Sporting Cristal, el defensa Jesús Álvarez ha
vuelto a tener la continuidad anhelada en el César Vallejo de Franco Navarro.
El 'Chasqui' se confesó en exclusiva a LÍBERO y explicó los
pormenores de su salida del
cuadro 'celeste'.
¿Tu apelativo de “Chasqui” a qué se debe?
Cuando estaba en Bolognesi el “profe” Sampaoli le
dijo a Jorge Desio que haga unos test de pasadas y lo hicimos con Roberto
Guizasola, lo pasé en la vuelta 23-24 y me tiró “Jesús, tu pareces a un
chasqui, cómo corres” y quedé bautizado así.
¿Por qué decidiste dejar Cristal?
Las circunstancias te llevan a tomar decisiones, ya no me sentía cómodo en
Cristal, además de no tener continuidad evalué el aspecto económico, deportivo y
acepté irme a otro club.
¿Buscabas ritmo o hubo problema con los dirigentes?
No me fui mal con los dirigentes, ni con nadie del club. Como se sienta uno
valorado en el tema deportivo y la continuidad, si no disfrutas, es mejor
buscar nuevos aires. Alguien dijo “hay jugadores que juegan con un entrenador y
otros que no”.
¿O no encajabas en el manual de estilo del club?
El manual es hecho por los
dirigentes, lo leí antes de llegar al club, comparto muchas cosas de lo que
está ahí, pero el manual no es siempre el mismo que maneja el capitán del barco
(entrenador). Buscar el equilibrio es complicado, el técnico tiene su propio
manual donde se espera tener las suficientes armas y métodos que llegue al
jugador.
¿Ser dirigido por un DT que se inicia (Ahmed) también
afecta?
No era porque el técnico era joven, pasaba por comodidad. Hubo una buena
relación de respeto con el DT, me parece que con el tiempo va a quemar etapas.
Simplemente no era prioridad en su sistema, no encajaba en su idea futbolística
y no lo supe por él, lo dirigentes me lo dijeron.
¿El saber que no estabas en sus planes te incomodó?
Yo entrenaba duro y al parecer no me alcanzaba para llegar al día del partido.
Cada técnico sabe cómo arma su once. No pasó nada extrafutbolístico para irme,
pero sí hubiera querido enterarme que no me querían por el mismo técnico y no
por un dirigente. Pero no descarto regresar.
¿Ahora tomas nuevos aires en la Vallejo?
Esas circunstancias que te conté, me llevan a tomar la determinación de
regresar al norte. Elegí Vallejo porque es un club serio que últimamente está
presente en torneos internacionales y se están haciendo las cosas bien. Tengo
amigos y vuelvo a ser dirigido por Franco Navarro.
¿Aún estás para la selección o ya es capítulo cerrado’?
El sueño está, espero nada más tener la regularidad y poder estar en la próxima
Copa América. Pero eso depende del actual entrenador (Pablo Bengoechea),
solo me queda entrenar y trabajar duro para poder ser llamado. No pierdo las
esperanzas.