martes, 13 de febrero de 2007

Nunca se desprecia ganar


Rodó el balón en la UNCAF y los nervios del primer partido pasaron. Nota aprobatoria de la Tricolor. Aun está en la retina el cabezazo de Fonseca, que dio esa tranquilidad que necesitaba el actual campeón.
Ganó tres puntos vitales que permiten que la selección tica pueda reorganizar algunos puntos débiles que quedaron; como en toda presentación, algunos jugadores se estrenaban en torneos internacionales, los nervios es cosa general, en todo debut de campeonato.
Mañana la Tricolor llegara más descansada y los errores del debut no serán tan evidentes, en su intento por ratificarse como el mejor del certamen tal como ocurrió hace dos años.
Honduras le complicó en los minutos finales de la primera mitad y eso avisaba que el segundo tiempo no sería nada fácil; así fue -a pesar de que los ticos pusieron el segundo gol-.
Muchos dirán que el título de “Salvador” le puede quedar grande a Rolando Fonseca con dos tantos, pero lo cierto es que su segundo gol personal (que hace igualar a Wanchope como goleador histórico), fue fundamental porque le bajó el ritmo a los hondureños, que se estaban apoderando del medio sector y estaban más cerca el empate que ampliar la ventaja.
Poco a poco los jugadores se irán acoplando línea por línea. Lo importante es que el clásico centroamericano fue para la “Sele” costarricense, eso hace soñar, hasta al más negativo, que este equipo puede estar para cosas mayores.
Columna publicada en Diario Al Dia de Costa Rica

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