Por Julio Alvarez Sebastian
Roberto Arrelucea es el responsable de llevar al protagonismo a la Universidad César Vallejo en la temporada 2008, el técnico llegó a nuestra ciudad en un momento que el cuadro poeta había caído en un vacío futbolístico que hacía peligrar el ascenso del cuadro poeta; todo se estaba viniendo abajo cual un castillo de naipes, pero la dirigencia trujillana tuvo el tino de traer en el momento adecuado a la persona idónea para virar el barco estudiantil hacia el puerto de retorno al fútbol profesional. Y se logró el gran objetivo. Ahora Vallejo apunta al protagonismo en esta temporada, para lo cual Roberto Arrelucea ha formado el equipo que le puede dar la satisfacción de mirar la tabla desde los primeros lugares en este torneo 2008, a diferencia de otras temporadas en donde ha tenido más de un inconveniente para formar sus equipos; adecuado por cierto a los presupuestos que maneja cada institución, en donde según propia confesión muchas veces tuvo que poner de su bolsillo. Ahora con Vallejo tiene la oportunidad de protagonismo, esperemos que su apuesta tenga eco en el grupo que se ha formado. Y la verdad que Roberto Arrelucea se lo merece por todo lo que tenido que hacer para mantenerse vigente en el fútbol peruano, y vaya que es meritorio para alguien que no es afin a los dirigentes que manejan nuestro fútbol; sino uno no se explicaría como no ha tenido alguna oportunidad en nuestra selección, por lo menos en una categoría menor, para demostrar su capacidad, y decimos esto con conocimiento de causa porque Roberto estudió para técnico en Argentina y no fue uno más de los graduados de su promoción sino que estuvo siempre entre los de mejor calificación, asimilación y aplicación de lo aprendido. Pero en fin para los dirigentes de nuestro fútbol muchas veces eso no cuenta, ellos tantas veces acostumbrados a elegir el compadrazgo, la franela, el ayayerismo, la sumisión, por encima de méritos y capacidades; ya nos hemos enterado lo que ha tenido que pasar nuestro estimado
J.J. Oré para mantenerse en el cargo, sufriendo en silencio una serie de atropellos de nuestros mediocres dirigentes.A Roberto Arrelucea lo conocemos desde la época de jugador y luego técnico del Sipesa Chimbotano, allí en el puerto norteño conocimos su filosofía futbolística en largas jornadas de diálogo en donde conocimos su pensamiento futbolístico, su vocación por el fútbol bien jugado, la claridad en el traslado del balón, el mirar siempre el arco rival aún sabiendo que tus opciones son escasas tienes que atacar, Roberto es de la idea que el fútbol sólo se juega de dos maneras: al ataque o al contrataque pero nunca colgado del arco eso no va con el pensamiento Arrelucea. Recientemente en la presentación de Vallejo 2008, recordábamos aquella vez del 2005 en el Estadio Monumental de la U, en donde dirigió en el preliminar al Atlético Universidad contra la San Martín, el cotejo de fondo fue un empate a cero entre Universitario y Universidad César Vallejo, en aquella ocasión nos acompañó para "Vísión Deportiva" de Radio Libertad en los comentarios de ese partido, quien iba a pensar que años más tarde vendría a dirigir al cuadro poeta. Cosas del Fútbol. Otra característica determinante de su fútbol es que generalmente apuesta por hombres y no por nombres, claro muchos dirán ¿ Y para qué ha traído tantas incorporaciones?, bueno se da el gusto de formar un cuadro competitivo, pero que no les quede la menor duda que por ejemplo Víctor Carbajal va a tener muchas oportunidades y Roberto buscará la ocasión de ir promocionando siempre nuevos jugadores, porque sería suicida jugar la máxima división sin la experiencia de algunos jugadores; simplemente te pulverizan, conociendo la mediocridad de nuestros dirigentes y la cobardía de algunos árbitros o acaso alguién olvida que en el descenso de Mannucci mucho tuvo que ver el ensañamiento del cuerpo arbitral en una confabulación casi siciliana. Y para no ir muy lejos, el año pasado, alguien olvida lo hecho por Aurich contra el Sport Vallejo en la Copa Perú, simplemente fue un acto casi DELINCUENCIAL, pregunto: ¿ el Papá de aquel oscuro árbitro de ese partido en donde está? ¿Coincidencia, verdad?...Bueno esperemos que Roberto Arrelucea tenga en Trujillo el oxígeno necesario para consolidar una posición protagonista en nuestro fútbol. Mientras tanto, mientras se fortalece el músculo, no olvidemos, como decía el poeta: "Hermanos, hay muchísimo por hacer".
J.J. Oré para mantenerse en el cargo, sufriendo en silencio una serie de atropellos de nuestros mediocres dirigentes.A Roberto Arrelucea lo conocemos desde la época de jugador y luego técnico del Sipesa Chimbotano, allí en el puerto norteño conocimos su filosofía futbolística en largas jornadas de diálogo en donde conocimos su pensamiento futbolístico, su vocación por el fútbol bien jugado, la claridad en el traslado del balón, el mirar siempre el arco rival aún sabiendo que tus opciones son escasas tienes que atacar, Roberto es de la idea que el fútbol sólo se juega de dos maneras: al ataque o al contrataque pero nunca colgado del arco eso no va con el pensamiento Arrelucea. Recientemente en la presentación de Vallejo 2008, recordábamos aquella vez del 2005 en el Estadio Monumental de la U, en donde dirigió en el preliminar al Atlético Universidad contra la San Martín, el cotejo de fondo fue un empate a cero entre Universitario y Universidad César Vallejo, en aquella ocasión nos acompañó para "Vísión Deportiva" de Radio Libertad en los comentarios de ese partido, quien iba a pensar que años más tarde vendría a dirigir al cuadro poeta. Cosas del Fútbol. Otra característica determinante de su fútbol es que generalmente apuesta por hombres y no por nombres, claro muchos dirán ¿ Y para qué ha traído tantas incorporaciones?, bueno se da el gusto de formar un cuadro competitivo, pero que no les quede la menor duda que por ejemplo Víctor Carbajal va a tener muchas oportunidades y Roberto buscará la ocasión de ir promocionando siempre nuevos jugadores, porque sería suicida jugar la máxima división sin la experiencia de algunos jugadores; simplemente te pulverizan, conociendo la mediocridad de nuestros dirigentes y la cobardía de algunos árbitros o acaso alguién olvida que en el descenso de Mannucci mucho tuvo que ver el ensañamiento del cuerpo arbitral en una confabulación casi siciliana. Y para no ir muy lejos, el año pasado, alguien olvida lo hecho por Aurich contra el Sport Vallejo en la Copa Perú, simplemente fue un acto casi DELINCUENCIAL, pregunto: ¿ el Papá de aquel oscuro árbitro de ese partido en donde está? ¿Coincidencia, verdad?...Bueno esperemos que Roberto Arrelucea tenga en Trujillo el oxígeno necesario para consolidar una posición protagonista en nuestro fútbol. Mientras tanto, mientras se fortalece el músculo, no olvidemos, como decía el poeta: "Hermanos, hay muchísimo por hacer".
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